
Suelo estar analizando mucho a los hombres, básicamente por envidia. Asi que encuentro muy pocas cosas para botonearlos en lo que a su esencia se refiere.
Pero últimamente he estado sintiendo pellizcadas del botón aquel con disciplinas como… EL ARTE DE PIROPEAR. Yo soy blanco de muchos piropos y no porque sea linda, fea, chancha, culona, tetona, … sino por caminar sola! -o sola para el que me ve-. Me convierto en el objetivo de todo aquel que quiera disparar un rato.
Si se acercan más de lo que lo haría mi perro, y me expresan sus mas íntimos deseos…
Por qué no lo dicen claro??? No se les entiende nada!!!
En ese afán de decirlo sin obstáculos lo mandan tan rápido que se convierte en una escupida indecifrable.
Ya que igual van a irrumpir en mi mundo adoquinado, yo prefiero que bajen un cambio, manden la guarangada mirando a los ojos… o a las tetas, o a la boca, o al cuello, o a lo que sea, pero con firmeza! …no una voladita de insecto pues la verdad el zumbidito ese es bastante molesto!