El rubro servicio es uno de esos en los que dar un peso de más sin recibir nada a cambio me despeluca un poco. Así es que el sábado pasado después de un poderoso desayuno decidí dejar de regalarle mis $89 mensuales a los del cable y desempolvar la caja heredada que desde tierras orientales habia quedado en el olvido.
Rock of Love 2 me dio la bienvenida!!
Mi historia con la primera parte -si los realitys que buscan el verdadero amor también tienen partes- había terminado con la ilusión de que Bret y mi softly Jes arreglaran sus diferencias y entrelazaran sus cuerpos para siempre!
No sólo no las arreglaron sino que el insistente rockero va por más, sabiendo que si no se empoma a todos los gatos que logró reunir en esta, la tercera parte la tendrá que remar con lo que le pongan.
No se si el contrato que firmó tiene muchas cláusulas que lo aprietan, pero cabe destacar la infinta paciencia que tiene con las locas conflictivas que lo acompañan.
A los 5 minutos de programa yo literalmente las quería sacar a patadas de la casa, una se burlaba de las otras desde la inmunidad de haberse echado un polvo con Bret, otra lo buscaba desesperadamente para reclamarle que no la registraba, otras dos relegadas se revolcaban en su libre cerebro, otra cuasi extra miraba todo el tiempo a la cámara.
El en cambio, sentado encorvadito pero con su corona de tela y su nunca de lado trompita estirada, le oyó a una que no me acuerdo el nombre sus dramas ancestrales y dualidades evidentes. Muy sabiamente la dejó desahogarse y la mandó a dormir, pues nada como dejarnos ir por otros mundos para que se nos aclare la mente.
Si no hay conflicto/drama/incomodidad.. no hay paraíso?
